Y como las olas, que vienen y se van, ya casi terminó otro año. Un año que vino y, parece mentira, ya está por irse. Llega el momento del balance, que sale naturalmente, y uno empieza a preguntarse qué resultó, qué obtuvo de este año. Y es raro, pero es así. Todos se ponen más emotivos, y es que es costumbre. Será que creemos mucho en el tiempo, o algo parecido, que el hecho de que pase un año nos sensibiliza y nos hace sacar conclusiones. Y también llega la ansiedad del año que está por comenzar, lleno de deseos e ilusiones. A mí en particular, me encanta año nuevo, porque lo siento como una renovación. Si el año que termina fue bueno o malo, no importa; está por empezar algo distinto, jamás igual: diferente. Y éso es genial. ¿Qué más renovador que cambiar un poco? Lo cual no quiere decir que las cosas vayan a ser distintas por completo, pero nunca iguales. El cambio es vida, sorpresa, y sobre todo: es un no rotundo al aburrimiento.
Les deseo a todos un muy feliz año nuevo, y a empezar con todo este nuevo ciclo!
Y acá dejo una postal muy linda que encontré dando vueltas por la web, en un sitio lleno de postales antiguas hermosas. No dejen de pasar, vale la pena!!
Feliz año nuevo!
1 comentario:
Flor los mejores deseos para esta Navidad y por un 2009 lleno de buenos proyectos, Salud y esperanza besote grande!! grande
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